domingo, 16 de enero de 2011
...IMPACTANTE...
¿Hay alguien que no conozca esta fotografía? Difícil, ya que ha dado vueltas al mundo a través gracias a un premio que ganó su autor: Kevin Carter, en 1994 fue premiado con el Pulitzer. Él y otros dos fotógrafos testigos de los más cruentos conflictos que han azotado recientemente el continente africano, pasándoles factura en poco tiempo. En el momento de la foto un buitre está acechando a una niña de Sudán, que esta se dirigía a un campamento de la ONU que estaba a unos 100 metros. Kevin Carter esperó durante 20 minutos haber si el buitre abría sus alas para conseguir una foto con mayor dramatismo, pero no lo consiguió. Un año después, atormentado con los remordimientos este hombre se quitó la vida.
Esos fotógrafos se dirigieron allí para realizar fotos, fotos crueles que reflejasen lo que esa pobre gente estaba viviendo, pero quizá no se esperaban encontrar algo así. En el momento en el que el autor se encontró esa situación no se que se le podría pasar por la cabeza, puede que pensase que no volvería a tener un momento tan increíble de tener una posibilidad que tanto le acerque a poder ser el futuro dueño de ese premio o puede que ser el público de una imagen así le llevara a pensar en salvar después a esa criatura. Dicen que Kevin Carter ahuyentó a el buitre para poder proteger a la niña y que la intentó llevar al campamento, pero poco se sabe de ella.
Las personas somos diferentes entre sí, pero todos tenemos razón y sentimientos. Cada persona hubiese actuado de una manera ante tal situación, y quizá sean muchos los que la hubiesen dejado allí, pero no todos. En ese momento no hubiese ni podido pensar en la instantánea, hubiese llevado a la niña al campamento. Quizá no hubiese sobrevivido porque se ve en terribles condiciones, y hubiese estado atormentada pensando en que ella se merecía crecer y tener un vida no tan miserable como estuvo viviendo hasta entonces. Entonces ese gesto de mi parte me hubiese hecho al menos estar más tranquila conmigo misma.
No culpo del todo al autor porque no conozco bien la realidad de lo que pasó, pero el hecho de estar durante 20 minutos viendo a una niña que se estaba muriendo, tan solo para esperar tener una foto mejor, le convierte en una persona algo miserable.
Dados los hechos se ve que la foto era algo muy importante, pero ¿tan importante como dejar el tiempo correr y de esa forma tener mas posibilidades de dejarle morir?
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario